Cortesía de la Casa

Estamos haciendo un recuento de lo vivido durante los 5 días del festival CMJ Music Marathon 2011. Ahí encontrarán videos en vivo de las bandas, o fotos, o nada (dependiendo de cuánto apestaron) , para que se hagan una idea del potencial de cada propuesta musical. Por acá pueden ver lo acontecido en el resto de los días.

Un poco tarde, pero aquí va el reporte del último día en CMJ. Estuvo movida la cosa.

Comenzamos la jornada de nuevo en el Cake Shop con el powerpop de Diehard, una agrupación que me trasladó de vuelta al colegio, a los finales de la década de los noventa, cuando el mundo era un poco más sencillo. Buena melodía y coros pegajosos tienen estos chicos, y además me sorprendió lo organizados que son a la hora de poner su mercancía a disposición del público. Hasta las bandas más grandes de este festival podría aprender un par de vainas de estos novatos, que al menos entienden en dónde se hace la plata.

Continuamos con el set minimalista de Colleen Green, quien sorprendió con algo de twee pop relajado. No es común que la gente esté así de animada cuando buena parte de la música la hace un drum machine, mucho menos si la mayoría de los asistentes están enguayabados. O a lo mejor el cambio en sonido fue una bendición para ellos. Bueno, en todo caso le fue bien a la china Green.

Después sí se jodieron los que llegaron al Cake Shop a tratar de poner fin a su resaca. Diarrhea Planet llegó con ganas de sánduche y de purgar a los asistentes. Y sí que temblaron las tripas. 40 minutos de puro rocanrol que terminaron pareciendo 5 y dejaron a la audiencia con ganas de muchísimo más. Una pena que esta fuera su única presentación durante el festival.

Luego venía Bleached a quienes ya había visto y me parecieron bastante meh, así que caminé un par de cuadras a la fiesta de la revista Spin y me encontré con The Barr Brothers. Los canadienses claramente entendieron que tocaban para un público “de edad” y cautivaron con su folk adulto-contemporáneo.

Regresé al Cake Shop, a la presentación de Daniel Pujol y su banda (llamada… eh, PUJOL). No sé si la cerveza gratuita ya comenzaba a ser efecto en mí, pero me pareció que su música fue mucho más agradable que la mayoría de cosas que conocía previamente de ellos. En fin, pusieron a poguear a toda la audiencia (incluyendo a todos los integrantes de Diarrhea Planet).

La “fiesta” terminó con Turbo Fruits y otro set incendiario que puso a bailar hasta al más cucho de los presentes. Con todo y que la “tarima” del Cake Shop está a escasos 15 centímetros del piso, la banda terminó tocando entre el público, al mejor estilo de Lightning Bolt, y fue el mejor cierre que pudo haber tenido el evento. Terminé bañado en nectar de cebada.

Para la noche fuí invitado por la gente de NME a su fiesta de clausura del festival, que incluía a varias de sus propuestas británicas favoritas y algunos destacados “locales” (claro, FIDLAR no podía faltar).

Me entretuve bastante con FIDLAR y los chicos del Bleeding Knees Club. Bien ruidositos esos vergajos. Pero la verdadera sorpresa (y el principal motivo de la invitación) fue King Krule.

Conformada por peladitos de alrededor de 17 años de edad, trabajan una combinación bien particular de folk, indie rock y jazz, con letras oscuras. La comparación evidente se presenta a partir de la similitud en las voces y estilos de Archy Marshall y Alex Turner (este último es el vocal de Arctic Monkeys, duh). Tienen una vibra bastante complicada que no funcionaría en radio comercial, pero seguramente se convertirán en referencia para blogs y músicos en un futuro.

Y ya, se acabó esta vaina. Recuerden mirar el resumen de los demás días por acá. Probablemente escriba una pieza más concreta y con una perspectiva más “macro” de lo visto en CMJ, pero eso irá en otra parte. Yo aviso por el tuiter.

Pero para que quede constancia, síganle la pista a Alabama Shakes, FIDLAR, Tristen, Braids, PUJOL y King Krule. Eso fue lo mejor que ví entre lo menos conocido.

Quiero agradecer especialmente a Dayna Ghiraldi de Big Picture Media por todas las gestiones relacionadas con la acreditación, y esperamos poder regresar a CMJ en 2012. Ustedes también deberían ir haciendo planes para asistir. Son 5 días que cambian vidas.

Y sí, tenemos vainas para regalar, así que pendientes del tuiter y el facebook de Cortesía de la Casa durante las próximas semanas. Quedan informados.