Geometría Marciana
Por Julián Gutierrez • Jul 8th, 2009 • Categoria: CDCreseñas • 1 Comentario »The Mars Volta
Octahedron
Mercury, 2009
Por lo menos en mi experiencia, The Mars Volta ha resultado ser una de esas bandas tipo ‘O los amas o los odias’, no parece haber un punto medio a la hora de hablar sobre ellos; o bien son unos genios que recuperaron el Rock Progresivo, o son ruido inaccesible para escuchar mientras se consumen sendas dosis de peyote. Ya sea para bien o para mal, la banda de El Paso, Texas continúa el camino que empezó a recorrer a comienzos de la década con su nuevo álbum de estudio, Octahedron.
No resulta descabellado afirmar que había un buen grado de expectativa con respecto a este álbum: A fin de cuentas, cuando una banda anuncia el lanzamiento de dos álbumes con material nuevo con poco tiempo de diferencia, siempre se piensa que el segundo no contiene más que las canciones que no lograron entrar en el primero, ya sea por tiempo, o por calidad. Una suposición que fue desechada en este caso ante las afirmaciones de las cabezas visibles de The Mars Volta, Cedric Bixler-Zavala y Omar Rodríguez-López. Mientras que el primero afirmaba que con este álbum querían hacer algo más pop, Rodríguez-López se refirió al Octahedron con los términos “Acústico” y “Calmado”.
Ciertamente hay diferencias entre esta grabación y sus anteriores trabajos. Mientras que en De-loused in the comatorium o en Amputhecture había un intento explícito de darle una coherencia narrativa y conceptual al álbum, las ocho canciones del álbum (Si. Ocho, “Octaedro”, sigamos por favor) lidian con distintos temas y escenarios imaginarios que si bien son esperables dentro del estilo lírico de la banda, no tienen un hilo conductor. En términos del sonido, sin embargo, la historia es completamente distinta. Las declaraciones de Bixler-Zavala y Rodríguez-López eran una interesante provocación ante lo que podía resultar siendo un nuevo capítulo en la historia del sonido de la banda, sin embargo, la expectativa que causaron sus palabras resultó siendo más bien un “Chorro de Babas”… Claro, es evidente que en una banda como The Mars Volta, las palabras “Pop” o “Acústico” habrían de adquirir un significado distinto al que tienen en otros contextos y en otras bandas, la diferencia en el sonido de este álbum con respecto a su referente inmediato, el The bedlam in Goliath es más bien poca. De las ocho canciones, solo ‘Copernicus’ y ‘Since We’ve been wrong’ logran cumplir con ser canciones acústicas en el verdadero sentido de la palabra y marcar una verdadera diferencia. Las seis canciones restantes son el sonido al que la banda nos tiene acostumbrados, con la guitarra de Rodríguez-López y su sonido hipnótico en capa tras capa de arreglos y producción.
¿Es un álbum que realmente aporte algo nuevo al sonido de The Mars Volta? ¿Es indispensable escucharlo para quienes siguen a esta banda? La respuesta a ambas preguntas es no. Octahedron no le hace justicia a las afirmaciones que hicieron los miembros de la banda sobre su sonido, se siente como ‘Mas de lo mismo’ (Aun cuando ese ‘Lo mismo’ sea The Mars Volta), y termina por sentirse como un álbum de relleno antes que como algo realmente nuevo y fresco.