CDCreseñas

Ve, Yo Conozco A Este Man

Por • Aug 27th, 2009 • Categoria: CDCreseñasComments Off on Ve, Yo Conozco A Este Man

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Brendan Benson

My Old, Familiar Friend

ATO, 2009

Todos conocimos bien sea en el colegio, la universidad o en el trabajo a alguien que si bien era bueno en lo que hacía, por X o Y razón no siempre obtenía el reconocimiento que merecía. En la música pasa lo mismo, como ocurre por ejemplo, con John Deacon; probablemente uno de los mejores bajistas que ha parido el rock (Si no el mejor), y Brendan Benson, quien ha disfrutado un mayor reconocimiento de su obra en solitario, gracias a su trabajo en The Raconteurs, y quien lanza su cuarto álbum en solitario: My Old, Familiar Friend.

Las veces que he hablado de proyectos en solitario de miembros de bandas reconocidas (Como el caso de Paul Banks/Julian Plenti), o de bandas como The Dead Weather, he comentado sobre el cruzamiento de influencias que se puede ver en el sonido de dichos proyectos, y como se hace evidente lo que dicho músico en particular le da al sonido de la banda en general, un peculiar ejercicio de ingeniería reversa. En el caso de Benson, algo de esto llega a ser evidente, pero en una dinámica distinta. Si en el caso de Banks su álbum dejaba ver lo que él le da al sonido de Interpol, el nuevo álbum de Brendan Benson nos muestra lo que él ha adquirido en los últimos tres años al tocar con Jack White y compañía en The Raconteurs. Habiendo conocido la obra del músico de Michigan con su álbum The Alternative To Love, esperaba, hasta cierto punto, más de lo mismo, siendo ese ‘Lo mismo’ un sonido enmarcado claramente dentro del rock alternativo de los noventa y de bandas como The Wrens que tienen una evidente influencia dentro del sonido de Benson.

Con el paso del tiempo sus canciones han adquirido algo más de sustancia y de “Oomph”, las guitarras tienen un sonido ligeramente más sucio, los arreglos de teclado han dejado de ser discretos y han adquirido más capas y presencia, lo que redunda en general en un sonido más sustancioso de las canciones que a su vez, tienden a ser más enérgicas y fuertes que en su álbum de 2005, algo que se puede a través de la participación de Dean Fertita (Queens of the Stone Age, The Dead Weather) en el álbum, y que a su vez nos habla del crisol de fundición que se está formando en la escena del medio oeste estadounidense en la que las líneas limítrofes entre géneros y sonidos, antes tan marcadas, empiezan a borrarse para dar a conocer nuevas bestias musicales.



El IDEAM debe morir

Por • Jul 22nd, 2009 • Categoria: CDCreseñas1 Comentario »

thedeadweatherhorehound

The Dead Weather
Horehound
Third Man, 2009

Pareciera que hay personas que necesitan estar haciendo música para mantenerse vivos, igual que un tiburón necesita estar nadando todo el tiempo, y Jack White parece ser una de esas personas; mientras su compañera de banda Meg White vuelve a un ‘ritmo de competencia’, el músico de Detroit hace sonar su guitarra con cualquiera que se atraviese en su camino, ya sean los Raconteurs, o The Dead Weather, la banda que formó con Alison Mosshart (The Kills), Jack Lawrence (The Greenhornes) y Dean Fertita (Queens of the Stone Age), y que presenta su álbum debut, Horehound.

Como estoy seguro que es el caso de muchas personas, cada vez que oigo las palabras ‘supergrupo’ o ‘colaboración’ giro los ojos hacia un lado y hago una expresión de evidente hastío; la razón es sencilla, las mas de las veces (Por no decir todas), esos acontecimientos no son más que ferias de la autocongratulación y el menor esfuerzo posible, dando como resultado proyectos que, en el mejor de los casos apenas satisfacen las expectativas y la mayoría de las veces son simplemente mediocres. Sin embargo, White ha sido enfático al decir que proyectos como este y The Raconteurs no son supergrupos, sino bandas normales cuyos integrantes resultan ser músicos ya establecidos y con otros proyectos reconocidos, y al igual que ocurre con The Raconteurs, en Horehound cada uno de sus integrantes tiene la oportunidad de aportar lo mejor de su estilo propio, dando pie a unos interesantes diálogos entre instrumentos y estilos que permiten una mezcla que se siente realmente homogénea en el sonido de la banda, en la que no es posible identificar de manera específica las contribuciones de cada uno de los miembros de Horehound y que combina el sonido “Garajudo” de la guitarra de White con la sensibilidad stoner de Fertita y la tradición del bluegrass y Blues de Lawrence, rematando con la voz lo-fi y de actitud punk de VV Mosshart. Una combinación que se ve con toda su fuerza en la segunda mitad de Hang You From The Heavens o en el tema instrumental 3 Birds.

Como cualquier banda común y corriente, el principal reclamo que se le puede hacer a The Dead Weather es que en ocasiones, uno de sus miembros adopta un protagonismo desmedido, en este caso, el álbum sufre de un ‘Mosshart-centrismo’ que se manifiesta en que la vocalista de The Kills escribió (o co-escribió) ocho de las diez canciones del álbum y que la ilustración de la portada es una foto de ella. Para quienes (como yo) consideramos que Alison Mosshart es una vocalista algo sobrevaluada (siempre he considerado que su voz es muy parecida a la de Shirley Manson), esto puede ser un punto delicado a la hora de darle una oportunidad al álbum.

Les propongo un experimento, muéstrenle este álbum a cualquier persona sin decirle quienes integran la banda para que les de la opinión más honesta sobre el mismo. Les apuesto que esa persona dirá que es un álbum muy interesante y que de alguna manera, logra combinar el sonido de esta década que ya está terminando en una mezcla homogénea y concisa.



Serpientes Muy Chiquititas

Por • Jul 15th, 2009 • Categoria: CDCreseñasComments Off on Serpientes Muy Chiquititas

Tinyspiders

Tiny Vipers
Life On Earth
Sub Pop, 2009

Seattle… ciudad de mucha lluvia, hogar de psiquiatras imaginarios como Frasier Crane, escenas musicales que definieron el sonido de una década, y artistas como Jesy Fortino, conocida como Tiny Vipers y que lanza su segundo álbum de estudio, Life On Earth.

Admitámoslo, todos juzgamos los libros con base a su portada, y las más de las veces, ese primer juicio tiene bastante validez, una idea que es particularmente válida en el caso de este álbum. La imagen que proyecta Fortino de una mujer pequeña, menuda y de aspecto algo frágil combina perfectamente con las canciones de este álbum, que a su vez, representa un cambio estilístico con respecto al sonido más concreto, solido y tradicional de su primer álbum, Hands Across The Void. Las 11 canciones que hacen parte de Life On Earth pueden ser descritas con términos tales como ‘etéreo’, ‘difuso’ o incluso ‘espectral’. Temas como Eyes Like Ours, Slow Motion o Tiger Mountain tienen una peculiar cualidad atmosférica, con arreglos que logran crear un estado de ánimo muy particular y muy específico. Young God y Twilight Property en particular, sobresalen en poner el muro de sonido propio del ShoeGaze al servicio del Folk, estableciendo una sensación que aunque un poco perturbadora, también invita a escuchar aun más a fondo estos temas.

También es digna de mención la voz de Tiny Vipers. Los tonos bajos, un poco rasposos  y bastante seductores en cuanto a su capacidad de enganchar al escucha Fortino son el complemento ideal para el sonido del álbum. Es una voz que funciona a la perfección con una música que puede definirse como mínima, y que en lo que resulta una de sus propiedades más sorprendentes, logra evocar un extraño déjà vu. Se ha escuchado algo similar antes, pero no es posible recordar con precisión donde, y esa búsqueda constante también hace que sea  muy fácil volver al álbum, ya sea por querer escuchar de nuevo esa voz, o por querer descubrir de una vez por todas a que se parece.

Con un sonido que recuerda a Cat Power en sus primeras épocas, Life On Earth de Tiny Vipers es un álbum sólido y que no decepciona. En un género como el Nuevo Folk que empieza a mostrar signos de saturación, siempre es bueno encontrar artistas que no se sienten como fotocopias de otros y que presentan una propuesta interesante y que no se sienta predigerida o manufacturada.



Geometría Marciana

Por • Jul 8th, 2009 • Categoria: CDCreseñas1 Comentario »

marsvoltaoctac

The Mars Volta
Octahedron
Mercury, 2009

Por lo menos en mi experiencia, The Mars Volta ha resultado ser una de esas bandas tipo ‘O los amas o los odias’, no parece haber un punto medio a la hora de hablar sobre ellos; o bien son unos genios que recuperaron el Rock Progresivo, o son ruido inaccesible para escuchar mientras se consumen sendas dosis de peyote. Ya sea para bien o para mal, la banda de El Paso, Texas continúa el camino que empezó a recorrer a comienzos de la década con su nuevo álbum de estudio, Octahedron.

No resulta descabellado afirmar que había un buen grado de expectativa con respecto a este álbum: A fin de cuentas, cuando una banda anuncia el lanzamiento de dos álbumes con material nuevo con poco tiempo de diferencia, siempre se piensa que el segundo no contiene más que las canciones que no lograron entrar en el primero, ya sea por tiempo, o por calidad. Una suposición que fue desechada en este caso ante las afirmaciones de las cabezas visibles de The Mars Volta, Cedric Bixler-Zavala y Omar Rodríguez-López. Mientras que el primero afirmaba que con este álbum querían hacer algo más pop, Rodríguez-López se refirió  al Octahedron con los términos “Acústico” y “Calmado”.

Ciertamente hay diferencias entre esta grabación y sus anteriores trabajos. Mientras que en De-loused in the comatorium o en Amputhecture había un intento explícito de darle una coherencia narrativa y conceptual al álbum, las ocho canciones del álbum (Si. Ocho, “Octaedro”, sigamos por favor) lidian con distintos temas y escenarios imaginarios que si bien son esperables dentro del estilo lírico de la banda, no tienen un hilo conductor. En términos del sonido, sin embargo, la historia es completamente distinta. Las declaraciones de Bixler-Zavala y Rodríguez-López eran una interesante provocación ante lo que podía resultar siendo un nuevo capítulo en la historia del sonido de la banda, sin embargo, la expectativa que causaron sus palabras resultó siendo más bien un “Chorro de Babas”… Claro, es evidente que en una banda como The Mars Volta, las palabras “Pop” o “Acústico” habrían de adquirir un significado distinto al que tienen en otros contextos y en otras bandas, la diferencia en el sonido de este álbum con respecto a su referente inmediato, el The bedlam in Goliath es más bien poca. De las ocho canciones, solo ‘Copernicus’ y ‘Since We’ve been wrong’ logran cumplir con ser canciones acústicas en el verdadero sentido de la palabra y marcar una verdadera diferencia. Las seis canciones restantes son el sonido al que la banda nos tiene acostumbrados, con la guitarra de Rodríguez-López y su sonido hipnótico en capa tras capa de arreglos y producción.

¿Es un álbum que realmente aporte algo nuevo al sonido de The Mars Volta? ¿Es indispensable escucharlo para quienes siguen a esta banda? La respuesta a ambas preguntas es no. Octahedron no le hace justicia a las afirmaciones que hicieron los miembros de la banda sobre su sonido, se siente como ‘Mas de lo mismo’ (Aun cuando ese ‘Lo mismo’ sea The Mars Volta), y termina por sentirse como un álbum de relleno antes que como algo realmente nuevo y fresco.



Del Mosh Pit Al Passion Pit

Por • Jul 2nd, 2009 • Categoria: CDCreseñasComments Off on Del Mosh Pit Al Passion Pit

Passion Pit

Manners

2009, Frenchkiss Records

Si el comienzo de esta década nos mostró a bandas que recuperaban el sonido del lo-fi y cierto espíritu punk, entre 2008 y 2009 nos hemos empezado a encontrar con un sonido que si bien sigue tratando de reclamar una relación con el punk, tiene un elemento bailable muy fuerte, como es el caso de Passion Pit, quinteto de Cambridge, Massachusetts que presenta su álbum, Manners.

Es un hecho que hay música para cada ambiente y para cada ocasión. Hay días en los que uno necesita las guitarras super distorsionadas de Mogwai, mientras que hay días en los que es menester oír a los Red House Painters, y hay días en los que el imperativo es “agitar el esqueleto”, para lo cual, el álbum debut de Passion Pit (Después de su EP Chunk of Change), es lo más indicado. Los 45 minutos del disco sugieren “Baile” (estoy golpeando mis pies contra el piso y moviendo mi torso mientras escribo esta reseña). Lo que es más interesante del caso, es que cada uno de los cortes del álbum marca el ritmo de una manera distina; Swimming in the flood tiene un ritmo increíblemente lento y hasta cierto punto seductor, Make Light, el corte que abre el disco, es una explosión festiva, y The Reeling es el tema indicado para salir a la calle a buscar plan.

Si bien resulta un ejercicio de periodismo perezoso ubicar a Passion Pit con bandas como MGMT o Justice en términos de su sonido, ciertamente hay una similitud en su actitud y en aquello que transmite su sonido. Aquellos que consideran a bandas como las anteriores una muestra de ejercicios en forma y no fondo (Me cuento entre ellos), no encontrarán en este disco razones para convencerse de lo contrario, y muy probablemente le pongan la misma etiqueta a Passion Pit. Pero así como no todas las películas pueden ser Persona de Bergman, no todos los discos pueden ser Takk… de Sigur Rós. Hay momentos en los que lo único que se puede hacer es bailar sin remedio, y este álbum sirve para ello.



El Sonido Del Sol

Por • Jun 22nd, 2009 • Categoria: CDCreseñasComments Off on El Sonido Del Sol

Placebo

Battle For The Sun

2009, PIAS

Así como resulta difícil creer que un álbum como el Pretty Hate Machine de Nine Inch Nails ya tiene veinte años, es un poco sorprendente darse cuenta que una banda como Placebo ya lleva trece años haciendo sonar sus instrumentos, convirtiéndose en parte del sonido de una época, como ocurre con su sexto álbum de estudio, Battle For The Sun.

Fui uno de los muchos que creyó que con la salida del baterista Steve Hewitt de la banda se vendrían tiempos oscuros para Placebo. El mismo Brian Molko ha admitido que tras la salida de Hewitt, él y Stefan Olsdal se hicieron bastantes preguntas sobre el futuro de Placebo, preguntas que quedaron resueltas con la llegada de Steve Forrest, quién le ha dado un segundo aire al sonido de este trío inglés, sobretodo si se tiene en cuenta que Forrest fue criado en la tradición del hardcore como el exbaterista de Evaline, lo que explica la fuerza en temas como The Never-Ending Why, For What It’s Worth, o Breathe Under Water. Sin embargo, Forrest sabe cuando bajar las revoluciones de su batería, y así lo demuestra en Happy You’re Gone y Come Undone.

Por otro lado, si es cierto que los años dan madurez, uno de los mejores ejemplos es la voz de Brian Molko; los años y la cantidad industrial de cigarrillos que suele fumar en los conciertos han tenido su efecto, y la voz nasal que oíamos en Come Home se ha convertido en una de las voces más poderosas y evocativas del Rock en los últimos años.

Con  arreglos de instrumentos de cuerda y viento, Battle For The Sun es un álbum que le hace honor al carácter Sci-Fi del que hace referencia su título. Es por esta razón que el álbum adquiere un aire que es, a falta de un mejor término, épico. La nueva sonoridad de Placebo con este tipo de arreglos, se convierten en un arma de doble filo, y esto se siente en cortes como Julien y Battle For The Sun, en los que el clímax tarda mucho tiempo en llegar, la sonoridad se vuelve repetitiva, y práctcamente sobra el primer minuto de introducción.

Con un nuevo integrante que evidentemente enmarca un nuevo sonido, Battle For The Sun propone un nuevo capítulo en el libro de Placebo. Si bien es difícil compararlo con sus anteriores esfuerzos, el sonido de este trío inglés muestra con esta producción que con el paso del tiempo, la banda ha superado sus limitaciones y ha reconocido sus orígenes, al mismo tiempo que está dispuesta a recorrer nuevos terrenos ofreciendo algo que puede atraer tanto a propios como a extraños.



De Cuervos Y Cardenales

Por • Jun 18th, 2009 • Categoria: CDCreseñasComments Off on De Cuervos Y Cardenales

alexisonfire

Alexisonfire
Old Crows/Young Cardinals
2009, Vagrant Records

Algo le echan al agua en Canadá. No es posible que de un mismo país salgan bandas tan buenas y distintas como “Broken Social Scene”, “Metric”, “Danko Jones”, y “Alexisonfire”. Este último es un grupo de Post-Hardcore oriundo de Ontario y presenta su cuarto álbum de estudio, Old Crows/Young Cardinals (OC/YC).

El álbum arranca con una declaración contundente en su tema inicial Old Crows cuando Wade McNeil dice: “We Are Not The Kids We Used To Be” (No somos los chicos que solíamos ser). Además, las declaraciones que hace George Petit sobre querer ser la banda que le clave la cuchilla al screamo, son la evidencia de que este álbum tiene un sonido distinto al de anteriores esfuerzos. Los gritos casi ininteligibles de Petit que oíamos en su álbum anterior, Crisis, además de hacerse más comprensibles en canciones como Young Cardinals y Born and Raised, se han integrado cada vez más al sonido de esta banda.

Y es que “Alexisonfire” también ha cambiado con respecto a su álbum de 2006;  aunque la fuerza y agresividad propios del género siguen presentes en los once cortes que componen OC/YC, estos elementos se hacen más evidentes en términos de la atmósfera musical que en el sonido contundente y abrasivo, como ocurre en Midnight Regulations, The Northern o Burial.

Otra evidencia del cambio en el sonido que es evidente en este álbum, es la transformación en la dinámica de los tres vocalistas de la banda. Si antes Wade McNeil y Dallas Green servían como complemento a la voz de George Petit, ahora es Petit quien complementa a McNeil y a Green. Y realmente es Petit quien en canciones como Burial pone la experiencia del Hardcore de Ontario, experiencia obtenida en su proyecto “City & Colour” -porque Dallas Green no solo canta sensibles baladas con su guitarra acústica, también pone sus tatuados brazos al servicio del Hardcore-, lo cual, sin dejar de ser un cambio interesante en el sonido de “Alexisonfire”, deja dudas sobre qué tanto puede cambiar el sonido de la banda sin que la voz gutural de Petit deje de tener cabida dentro de la misma.

Si el primer álbum de “Alexisonfire” fue descrito como una pelea de cuchillos entre colegialas, Old Crows/Young Cardinals es el sonido de dos estudiantes de posgrado sacándose sangre. Es el sonido de una banda que con el paso del tiempo ha ido madurando y cambiando su sonido. El fervor de la adolescencia no puede mantenerse por siempre, pero puede convertirse en algo distinto.



Chirris De Helsingborg

Por • Jun 10th, 2009 • Categoria: CDCreseñas1 Comentario »

the sounds crossing the rubicon

The Sounds
Crossing The Rubicon
2009, New Line

Los comienzos de esta década vieron el renacimiento del New Wave de los ochenta, o algo parecido. Las bandas incluían a “Joy Division” y “New Order” dentro de sus influencias y se caracterizaban por un sonido lleno de sintetizadores. Varias (por no decir muchas) de estas agrupaciones desaparecieron tan rápido como aparecieron, mientras que otras lograron mantenerse, como es el caso de “The sounds”, el quintento sueco que lanza su tercer álbum, Crossing The Rubicon.

“The sounds”, liderada por Maja Ivarsson, tiene lo que podría describirse como ‘Agallas’, algo que se ha visto desde su primer álbum, Living in America, y que sigue viéndose en esta producción. Temas como Underground, Lost In Love, 4 Songs And A Fight, Midnight Sun y No One Sleeps When I’m Awake combinan guitarras y sintetizadores exitosamente, y con esto me refiero a que no hay ‘conflictos de poder’ entre los dos instrumentos, ya que se complementan y le dan un buen equilibrio a las canciones. Al mismo tiempo, cortes como Lost In Love o No One Sleeps… son temas con letras que de alguna manera refuerzan una imágen de Maja Ivarsson como una de esas mujeres que han endurecido su piel a punta de caídas y fracasos, pero que no temen levantarse, sacudirse el polvo y subirse al caballo una vez más con los riesgos que ello implica.

Siguiendo con el tema de Ivarsson, quienes esperan un regreso de la vocalista a los registros altos de las épocas de Hit Me, Seven Days a Week o Dance With Me, se verán decepcionados. Continuando con la línea del segundo álbum de la banda, la vocalista ha elegido mantenerse en un registro vocal bajo que le hace honor a las raíces new wave del sonido de este quinteto. En Beatbox y Underground, la vocalista hace gala de un estilo que nada tiene que envidiarle a Deborah Harry en Rapture, saliendo más que bien librada de la labor, aún cuando Beatbox y Home Is Where Your Heart Is sean los lunares en el álbum. Home Is Where Your Heart Is, es un tema extenuante para el oído por su extensión de siete minutos ya que corta con el estilo de la banda. Asimismo, Beatbox es un tema aburrido por su instrumentación, y suena peligrosamente similar a una canción de  los “Ting Tings”. Además, vale la pena resaltar que Katie White y Maja Ivarsson se parecen en poco.

Crossing The Rubicon es un punto medio en el sonido de la banda sueca, ya que mantiene elementos de sus trabajos más recientes al mismo tiempo que recupera cosas de su sonido temprano. A pesar de sus lunares y de ese sonido New Wave Revival que pareciera ser noticia de ayer, Crossing The Rubicon tiene una sensibilidad pop que hace que merezca una oportunidad.



Osos Folk

Por • Jun 4th, 2009 • Categoria: CDCreseñasComments Off on Osos Folk

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Grizzly Bear
Veckatimest
2009, Warp

De alguna manera, el nombre de una banda dice mucho sobre su sonido; quiero decir, es difícil imaginar a una banda llamada ´TurboNegro´ tocando algo distinto a punk con sutiles toques homoeróticos (Y por ‘sutiles’, quiero decir ‘evidentes’. No en vano aparecían con frecuencia en WildBoyz y Jackass). De la misma manera, una banda que se llame ‘AlexisOnFire’ no puede tocar algo que sea distinto a un hardcore que golpee con fuerza y velocidad a quienes la escuchan. Siguiendo esa lógica, no es descabellado que una banda llamada Grizzly Bear tenga una propuesta con tintes folk como la de su más reciente álbum Veckatimest.

Siguiendo con la idea de ponerle un adjetivo al álbum como en pasadas reseñas, Veckatimest puede ser descrito como un álbum ‘atmosférico’. Una cualidad que es producto de las vocales etéreas de temas como Southern Point, Dory, o Cheerleader, así como por otro lado, se refleja en temas como Hold Still, Foreground, All We Ask o Ready. En Able, dicha cualidad se logra gracias a una instrumentación reverberante y llena de capas que aunque sin ser shoegaze, es igual de efectiva a la hora de crear un Muro de Sonido, lo que recuerda a anteriores trabajos de la banda de Brooklyn. A pesar de ello, hay elementos distintos y menos etéreos como lo demuestran While You Wait For The Others y About Face.

Al final del día, su principal atributo viene a ser el principal vicio del álbum, esa cualidad tan atmosférica y tan etérea hace que Veckatimest sea un álbum difícil de digerir a la primera vez que se escucha y que requiere varias repasadas para lograr que se asiente en el espectador, y la verdad sea dicha, no contiene muchos argumentos para atraer a nuevos seguidores al barco del Oso Grizzly.



Guitarras Barbudas y Barbas Guitarrudas

Por • May 28th, 2009 • Categoria: CDCreseñas1 Comentario »

iron & wine

Iron & Wine
Around the Well
2009, Sub Pop

Hay algo muy sugerente en la imagen propia del folk del artista solo con su guitarra en frente de una audiencia… Una curiosa paradoja que se remonta a las épocas de Bob Dylan, sigue con Joan Báez y en estos días es mantenida por Dallas Green (de City & Colour) y Sam Beam, más conocido como Iron & Wine que lanza su álbum de rarezas y lados b, titulado Around The Well.

A través de dos discos y más de noventa minutos, es posible encontrarse con dos sonidos muy distintos pero a la vez con mucha familiaridad dentro del proyecto folk de Beam. Los cortes del primer disco tienen un peculiar sonido lo-fi que se nota particularmente en temas como Ping! 33, Loud As Hope, o Swans And The Swimming. La conjunción de ese sonido poco pulido con la naturaleza folk de Iron & Wine resulta en un producto que potencia esa ‘folk-idad’ y que termina en el cover que hizo Beam de Such Great Heights de The Postal Service; un himno del indie de esta década y que aunque de origen completamente electrónico, en su versión folk no deja de ser merecedor de atención.

Por otro lado, el segundo disco nos muestra un sonido parecido pero distinto, con un sonido mucho mas pulido, acompañado de una instrumentación mas profusa, como en el caso de Serpent Charmer o Kingdom of the animals, al igual que los cortes del primer disco, sigue teniendo una poderosa sensación de cercanía e intimidad que demuestra las posibilidades del sonido folk.

Cuando hablaba del reciente álbum de Maxïmo Park, comentaba como era un punto de entrada ideal para quienes no conocían la banda. Este álbum es todo lo contrario, quienes no son muy amigos de este sonido suave y calmado del folk encontrarán más razones para renegar de él, mientras que quienes gustan del mismo y de Iron & Wine en especifico encontrarán rarezas que considerarán que vale la pena tener, al mismo tiempo que se ve la influencia de Beam en proyectos como City & Colour y en general, en esta ‘nueva generación’ del folk .